Una sorprendente panadería-prisión de la antigüedad emerge en Pompeya

Las excavaciones de Pompeya han sacado a la luz un descubrimiento sin precedentes: una panadería-prisión, un lugar donde se encerraba a personas y burros para moler grano. Este descubrimiento, surgido en la Regio IX, ínsula 10, proporciona evidencia única de las condiciones de vida de esclavos y animales en los antiguos molinos de panadería.

El sitio, descubierto como parte de un proyecto de seguridad y mantenimiento, consiste en una casa en proceso de renovación, dividida entre un sector residencial y un sector productivo dedicado a la panificación. Tres víctimas humanas, encontradas en una de las habitaciones, atestiguan que el lugar estaba todo menos abandonado.

La estructura, descrita en detalle por el escritor Apuleyo en el siglo II d.C. en sus Metamorfosis refleja una realidad escalofriante. Las estrechas habitaciones, sin vistas al exterior y con pequeñas ventanas enrejadas, hablan de un trabajo agotador y de una vida de extrema limitación para los esclavos.

En la zona de las muelas, donde existen huecos semicirculares en las losas de basalto, se destaca el ingenioso pero severo mecanismo para mover la muela. Según fuentes históricas, una pareja formada por un burro y un esclavo solía encargarse de esta extenuante actividad. El desgaste de las distintas tallas atestigua el incesante trabajo realizado según un esquema rígido.

Gabriel Zuchtriegel, director del Parque Arqueológico, subraya cómo este descubrimiento pone de relieve el lado más cruel de la antigua esclavitud, un mundo de violencia y privación de libertad. El descubrimiento adquiere un significado aún más profundo, conectando con el contexto histórico-religioso de la época, como lo destacan las palabras de Pablo, figura del cristianismo primitivo.

Mientras Pompeya celebra un número récord de visitantes en 2023, con más de cuatro millones de entradas, este descubrimiento añade un nuevo capítulo a la comprensión de la vida cotidiana en la ciudad antigua.

El descubrimiento de la panadería-prisión no es sólo un momento de revelación histórica, sino también un recordatorio de la complejidad y profundidad de la civilización romana, con sus luces y sombras.